En cuartel de la Tercera Compañía velan a "Bombero Insigne" Manuel Quiniyao Muñoz


Puerto Aysén-. Pesar en la comunidad de Aysén y en todos quienes integran el Cuerpo de Bomberos de Aysén, luego del lamentable deceso de Manuel Quiniyao Muñoz, quien a sus 74 años falleció en el accidente ocurrido el jueves en la ruta Aysén-Coyhaique.
Manuel deja dos hijos, nietos y mucha gente que lo quería y lo admiraba por su sencilla forma de ser. A los 13 años ya era parte de la Tercera Compañía de Bomberos, la que lo recibió y donde se formó por más de 56 años en este hermoso voluntariado. Su historia de apoyo a la comunidad siempre ocupó gran parte en su vida, en cada emergencia acudió con la mayor prontitud a fin de evitar situaciones de gran magnitud, recibió muchos reconocimientos, fue oficial de su compañía y debido a larga trayectoria fue condecorado como "Bombero Insigne de Chile".
"Le que yo siempre le decía a "mañuco", ya que lo conozco de que tengo memoria, él es parte de nuestra historia como aiseninos, es hijo de colonos. Ahora, ¿cómo llegó a Bomberos?, fue producto de un gran incendio que hubo por los años 60, en el internado de las monjas y a él lo cuidaba su hermano Antonio. Sobre ello, Manuel contaba que su hermano lo pasó a dejar a una casa, porque el hermano era bombero en aquel entonces y de ahí le picó el bichito de ser bombero, es más o menos, lo que él conversaba", señaló el superintendente del Cuerpo de Bomberos de Aysén, Arturo Loaiza.
Arturo Loaiza, también como amigo de Manuel, cuenta que él siempre estaba participando junto a la comunidad en distintas actividades, ya que, fue bombero, pero también arbitro de Anfa local. "Manuel fue una persona muy activa dentro de la comunidad, aparte de ser bombero, él fue muchos años árbitro de la Anfa, muy conocido como un buen árbitro, con su genio, pero era muy buena persona, muy bueno para la talla cuando uno lo conocía. Una persona muy correcta, que no le negaba el saludo a nadie, si podía ayudar, lo hacía".
En sus últimos años sin dejar su pasión por el voluntariado, Manuel Quiniyao Muñoz, dedicó parte importante del día a día, al trabajo en la empresa de buses Ali, donde cada mañana trasladaba a quienes viajaban a Coyhaique desde Puerto Aysén y viceversa. En su labor siempre destacó su calidad humana, la sencillez, la cordialidad, el buen trato con la gente, una conversación y la talla a flor de piel, un chofer que muchos ya han comenzado a extrañar.
Debido a su gran amor por la vida bomberil, es que, su velatorio se está desarrollando en su querida Tercera Compañía, ubicada en pleno centro de Puerto Aysén y su funeral se llevará a cabo este domingo, en horario a confirmar.