Este jueves en el auditorio de la fiscalía regional tuvimos la oportunidad de reconocer el compromiso de más de 50 estudiantes del programa "Monitores Antidrogas" que este año participaron de la iniciativa. En total, 633 alumnos de toda la región han participado desde el año 2018 en las clases y talleres a escolares que hemos efectuado y donde hemos tenido también el apoyo de otras instituciones. 

Agradecemos sinceramente al Liceo San Felipe Benicio, Mater Dei, Antoine de Saint Exupéry, Bicentenario Altos del Mackay, Escuela Víctor Domingo Silva y Valle Simpson, por haber creído en esta iniciativa y por ser parte de este viaje durante el año en curso. 

Muchas gracias también a las alumnas y alumnos que han participado voluntariamente en cada una de las capacitaciones realizadas. Sinceramente, nos sentimos muy contentos por ellas y ellos.   Valoramos profundamente su disposición y motivación para aprender y convertirse en agentes de cambio en sus comunidades.

Nuestra esperanza es que esta experiencia les ayude a tomar decisiones informadas y los mantenga lejos del consumo y de cualquier actividad relacionada con la comercialización de drogas.

En el programa "Monitores Antidrogas", Fiscales, detectives de la PDI, oficiales de la sección OS-7 de Carabineros y profesionales externos de diversos servicios públicos como Servicio de Salud, entre otros, han efectuado charlas explicativas a escolares inscritos.

Su objetivo general es crear conciencia en la comunidad escolar sobre los riesgos del consumo de estupefacientes, relacionados con adicciones y posibles delitos en los que pueden verse involucrados como víctimas o imputados, tomando como base la ley 20.000.

Como objetivos específicos buscamos educar a los adolescentes voluntarios para que logren replicar, de manera formal o informal, la información aprendida con sus pares. Asimismo, buscamos generar instancias de trabajo mancomunado y planificado con otros organismos públicos relacionados con el sistema penal y de salud.

De verdad, el mundo de las drogas es muy complejo y queremos evitar ese dolor tanto para ellos como para sus familias, quienes también son víctimas cuando una persona se ve involucrada.

Esta formación de líderes al interior de los colegios es beneficiosa para toda la comunidad, porque no solo imparte información sobre los efectos de las drogas, sino que también capacita a los estudiantes para que se conviertan en replicadores de ese conocimiento.

Otro elemento relevante es que el programa Monitores Antidrogas destaca por su integración de diversas instituciones, como la fiscalía regional de Aysén, Carabineros, PDI, Servicio de Salud y otros servicios públicos.

Esta colaboración es única en Chile y muestra la importancia de trabajar de manera conjunta para enfrentar el problema de las drogas.

La educación y la promoción de conductas responsables en los jóvenes puede tener efectos duraderos en la calidad de vida de la región. Al involucrar a la comunidad escolar y fortalecer los valores de autocuidado, este programa siembra la esperanza de una región con menos índices de consumo y de delitos relacionados con drogas, generando un impacto positivo que perdure en el tiempo.