De acuerdo al Inventario Público de Glaciares en Chile existen más de 26 mil cuerpos de hielo de los cuales casi el 40% se encuentran en la Región de Aysén, siendo el territorio con más glaciares en Chile. Alberga íntegramente Campo de Hielo Norte y compartimos con Magallanes Campo de Hielo Sur los que juntos son la tercera extensión de hielo más grande del mundo, solo por detrás de la Antártida y Groenlandia. Más allá de los datos, estos imponentes cuerpos de hielo son no solo maravillas naturales de incalculable belleza, sino también elementos fundamentales en la regulación del clima global, la provisión de agua dulce y la conservación de la biodiversidad. La decisión de Naciones Unidas de declarar el año 2025 como el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares subraya la urgencia y la importancia de proteger estos ecosistemas vitales.
Los glaciares son esenciales para la regulación del ciclo hidrológico. Funcionan como gigantescos reservorios de agua, liberándola de manera constante, lo cual es crucial para los ecosistemas y para el abastecimiento de agua de las comunidades humanas. Además, son indicadores sensibles del cambio climático. La acelerada tasa de derretimiento de los glaciares en las últimas décadas es una clara señal de las alteraciones climáticas que estamos experimentando. Esta pérdida no solo amenaza con elevar el nivel del mar, sino que también pone en riesgo el equilibrio de los ecosistemas y las comunidades que dependen de los recursos hídricos que estos proporcionan.
La declaratoria de Naciones Unidas del 2025 como el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares es un llamado a la acción urgente. Nos invita a reflexionar sobre nuestras responsabilidades y a tomar medidas concretas para proteger estos valiosos recursos naturales. En Aysén, estamos comprometidos con esta causa y hemos decidido instalar una Mesa Regional del Hielo como acción concreta de coordinación de todos los actores involucrados en esta materia.
Este será un espacio de diálogo y coordinación entre diversos actores: científicos, comunidades locales, organizaciones ambientales y autoridades. Su objetivo será desarrollar estrategias integrales y sostenibles para la protección de nuestros glaciares y campos de hielo, estructurándose en torno a cuatro ejes de trabajo fundamentales:
1. Investigaciones en Glaciología para comprender mejor la dinámica de los glaciares, sus tasas de derretimiento y su impacto en el clima y los ecosistemas.
2. Adaptación al Cambio Climático y Manejo de Situaciones de Riesgo. Esto mediante estrategias para mitigar los efectos del cambio climático y gestionar riesgos asociados como inundaciones y deslizamientos de tierra y preparar a las comunidades y que cuenten con planes de emergencia.
3. Conservación y Actividades de Desarrollo en torno a los Glaciares. Pensando principalmente en el ecoturismo, promoveremos prácticas sostenibles que permitan el desarrollo económico sin comprometer la integridad de los glaciares.
4. Educación, Cultura y Difusión. Se implementarán programas educativos y campañas de difusión para sensibilizar a la población.
Los Campos de Hielo Norte y Sur también tienen una importancia geopolítica significativa. Su protección es crucial no solo para Chile, sino para la estabilidad y la seguridad hídrica global. Además, estos campos de hielo son parte integral de la ecoregión subantártica, un área de alta biodiversidad y valor ecológico único. La conservación es esencial para preservar especies endémicas y mantener el equilibrio de los ecosistemas.
Esta responsabilidad es compartida por todo el planeta, pero en Aysén y desde el Gobierno Regional, estamos decididos a liderar este proceso, demostrando que es posible equilibrar el desarrollo económico con la conservación del medio ambiente. Invitamos a todos los habitantes de la región y a la comunidad internacional a unirse en este esfuerzo. Juntos, podemos asegurar que estos magníficos glaciares sigan siendo parte del legado natural de la humanidad y que continúen desempeñando su vital rol en la salud del planeta.
La instalación de la Mesa Regional del Hielo es solo el primer paso de un largo camino que recorreremos juntos, con la firme convicción de que cada acción cuenta y cada esfuerzo suma.