Hugo Araya Leiva, Director Diario El Divisadero Si hiciéramos una encuesta, podríamos constatar que hoy, las demandas más sentidas de la comunidad generan un transversal consenso, por lo que el gran desafío para el Gobierno es comenzar a dar más y mejores señales de eficiencia en su gestión, donde el epicentro sean las personas y su bienestar, en especial las más vulnerables.
Tenemos que robustecer nuestra democracia y establecer una institucionalidad que se pueda hacer cargo de las necesidades más urgentes de las personas, y de generar los cambios que los ciudadanos/as demandan.
Por ello es que, las expectativas siguen estando puestas en una efectiva reactivación y en un efecto multiplicador que permita generar empleos y dinamizar la economía. Aspiraciones que por cierto no tienen sesgo ideológico, sino que simplemente representan la esencia más pura del sentido común y de los legítimos anhelos de cualquier ciudadano y ciudadana de este país.
Todos y todas esperamos que nuestro país salga de sus complicaciones y comencemos colectivamente a sentir, a palpar, mejores tiempos para así dejar atrás la incertidumbre y comenzar a poner nuestros mayores esfuerzos y convicciones en un mejor y próspero futuro para Chile, para Aysén y su gente.
Lo relevante es que siempre debemos asumir colectivamente nuevos desafíos, con las ganas de avanzar en aquellas áreas donde aún se advierten dificultades y con la convicción de que vienen mejores días en todos los ámbitos.
Porque con convicción y metas claras, es posible avanzar y encontrar ese justo equilibrio que se genera en toda sociedad democrática y en desarrollo que aspira a mejores condiciones de vida, a un mejor índice de desarrollo humano, equitativo, solidario e integrador.
Y es que más allá de cualquier duda, la colaboración público-privada es claramente una alianza fundamental para despegar, para reactivar y para asumir los nuevos desafíos con la fuerza y la convicción que un propósito como este requiere.
Anhelamos sinceramente que comiencen a advertirse señales positivas, que el ecosistema económico y productivo inicie un proceso de mejora constante y así se pongan en marcha nuevos proyectos, nuevas ideas, nuevos emprendimientos, y se genere en Aysén más integrador y tolerante que tenga un correlato en todos los rincones de nuestra sociedad.
Porque cuando nos va bien a todos, el bienestar se advierte y se instala en la comunidad una gran certeza, y desde ella, queremos que nuestra región y sus habitantes sean los principales protagonistas de un proceso en el que nadie sobra, sino que, por el contrario, todos somos necesarios.
















